De hecho encuentras un mundo mas pequeño del que creias encontrar. Una suerte de lugares comunes que se recorren dia tras dia; costumbres que permanecen inmoviles y que mutan tan despacio que solo cuando son otras distintas notas el cambio.
Las ilusiones que tenia de pequeño son eso: ilusiones de un niño pequeño. Y ahora caigo en la cuenta de que ninguna de ellas tiene lugar mas que donde siempre estaban; dentro de mi imaginación. La realidad es la que es.
La vida se convierte en lo que haces con ella. La vida es el modo en que miras, el modo en que sientes y comunicas lo que sientes. Hay que abrir bien los ojos y las palmas de las manos para que se te escape el minimo de verdad entre los dedos durante el transcurso de los dias.
Miro a los enormes ojos de mi hija y veo en ellos su modo de ver la realidad, tan pura y tan vital. Y entonces caigo en la cuenta de que todo es tan sencillo. Si, es obvio. La realidad es totalmente distinta a como la habias imaginado de pequeño.
De hecho, es mejor.
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